En la actualidad no se puede entender el funcionamiento de una empresa si no se habla de transformación digital. Te contamos en este post por qué es tan importante que los organismos inviertan en la digitalización.
En el mundo globalizado en el que vivimos, la tecnología digital es un factor clave para mejorar la actividad que desempeñan las organizaciones públicas y privadas. Sin embargo, la mera implementación de la tecnología por sí sola no produce un cambio determinante, sino que solo es el primer paso del largo camino de la transformación digital.
En este contexto, las empresas se ven obligadas a comenzar un proceso de cambios orientados a la digitalización, es decir, deben reinventarse a través del uso de la tecnología que genera, almacena y procesa los datos.
Estas son algunas de las razones por las que deben hacerlo:
- En primer lugar, si el cliente está plenamente adaptado a las transformaciones digitales en su día a día y también en su forma de consumir, las empresas en las que este confía para comprar productos y servicios no pueden ni deben quedarse atrás.
- Ser una marca reconocida y respaldada por una buena reputación digital abre puertas a nuevas oportunidades de negocio potenciadas por el aumento de clientes.
- La optimización de los procesos internos de la empresa gracias a la tecnología es sinónimo de ahorro de tiempo, de materiales… Aunque la inversión inicial en digitalización suponga un gran esfuerzo económico, a largo plazo los beneficios serán mayores.
- La innovación ya no es un valor añadido en las empresas. Hay que buscar nuevos espacios digitales en los que moverse e ir más allá para diferenciarse del resto de compañías.
- La organización y exploración de los datos generados por una empresa a través del Big Data permite a las entidades localizar mejor a su público objetivo y sus necesidades. Así, el cliente se convierte en la prioridad y los datos constituyen una fuente de soluciones continua.
- Fomentar entre los trabajadores una cultura de cambio y transformación digital puede ser un elemento ilusionante y motivante para el desarrollo y crecimiento de la actividad que desempeñan en conjunto.
- Una empresa digitalizada puede desenvolverse en el mundo globalizado sin obstáculos, lo que le permite tratar con clientes y empresas de todo el mundo sin importar las barreras geográficas o culturales.
- Al realizar el cambio digital, los directivos también se replantean los supuestos en los que se ha basado tradicionalmente su negocio. Esto abre las puertas a encontrar y posicionarse en un nuevo emplazamiento empresarial y a explorar nuevas áreas en las que trabajar.
- La contratación de personal experto en nuevas tecnologías potenciará el aumento de empleo en un sector en el que cada vez hay más formación y preparación. Según un estudio de Randstad, la demanda de perfiles tecnológicos crece a un ritmo del 14% anual.
- Los jóvenes emprendedores que participen en la transformación digital, nacidos en la era de la tecnología, aportarán ideas y conocimientos novedosos a la forma de negocio tradicional.
En definitiva, la transformación digital de una organización no solo implica un conjunto de cambios a nivel tecnológico, sino que el modelo comercial también se adapta a los nuevos tiempos. Esto abre un sinfín de oportunidades en el mundo empresarial tanto para los empresarios como para los clientes.